PAÍS RELATO

Autores

adolfo bioy casares

otro soñador

Volvía de Claromecó en ómnibus. El señor que estaba sentado a mi lado me dijo de pronto:
—Como es probable que nunca volvamos a vernos, voy a contarle una historia que me afecta íntimamente. Le confesaré ante todo que la situación del hombre soltero no es demasiado cómoda. La gente quiere saber por qué; pero lo digo bien alto: estoy resuelto a seguir como ahora por el resto de mi vida.
Le pregunté con fastidio:
—¿Qué me quiere decir? ¿qué si está despierto no está dormido? Vaya la novedad.
—No se impaciente. Ya verá que mi historia es digna de atención. Por la noche sueño con una muchacha de extraordinaria hermosura. Qué rostro, qué distinción de manos. Cuando se las toco desfallezco.
No pude reprimir un calificativo que lo ofendió.